Cuando la atención al comensal es una experiencia inolvidable
En la industria de la HOSPITALIDAD, la excelencia no reside solo en lo que se hace (saber hacer), sino en quién se es al hacerlo (saber ser). Este artículo está diseñado para darle la pauta a transformar a su equipo en auténticos embajadores de su marca. Iremos más allá del acto mecánico de servir alimentos y bebidas para enfocarnos en la inteligencia emocional y la actitud profesional que construyen confianza y conexión.
Al dominar la esencia de la hospitalidad, su personal no solo cumplirá con su función, sino que desarrollará la capacidad de convertir cada interacción en una experiencia memorable que el cliente querrá repetir.
El Servicio como una Narrativa de Experiencias “WOW”
Los 13 desempeños del estándar EC 038 no son solo una lista de tareas; son los capítulos de una historia que el comensal vivirá con su marca.
Nuestra formación entrelaza estas actividades en un flujo diseñado para asegurar una experiencia inolvidable.
- La Preparación y el Primer Impacto
El viaje del comensal comienza mucho antes de tomar asiento. Los primeros tres desempeños, que van desde la recepción y bienvenida hasta la presentación del menú, son nuestra oportunidad para establecer una atmósfera de calidez y profesionalismo. Al ejecutarlos con un genuino “saber ser”, transformamos la incertidumbre inicial en un momento de bienvenida y comodidad.

ASEGURA ADECUADO INGRESO
- El Corazón del Servicio
Este es el clímax de la experiencia. La toma de la orden, la comunicación con la cocina y el servicio de alimentos y bebidas son actos que, cuando se realizan con precisión y atención a los detalles, demuestran un saber hacer impecable. Pero al acompañarlos de una actitud proactiva y una sonrisa auténtica, su equipo demuestra su saber ser, creando un momento de deleite que hace que el comensal se sienta valorado y no solo servido.
- La Continuidad y el Cierre Inolvidable
La experiencia de un cliente no termina cuando se le sirve la comida. La atención continua, el retiro de los platos, la presentación de la cuenta y la despedida final son los actos que cierran la narrativa. Al realizarlos con fluidez y calidez, eliminamos cualquier posible fricción de la salida.
Una despedida memorable no solo es un acto de cortesía, sino un poderoso recordatorio emocional que asegura que el cliente regrese y comparta su historia de éxito con los demás.

UNA EXPERIENCIA INOLVIDABLE
Cada uno de estos desempeños se convierte en un punto de contacto que, ejecutado con excelencia, asegura una experiencia inolvidable.
¿Qué le parece esta perspectiva de formación?, ¿Le gustaría que profundicemos en la forma en que el “saber ser” se integra en cada uno de estos desempeños?